jueves, 14 de enero de 2010

Cuarta MISIVA PARA NEO

En ese tiempo
eras un dios NEO
que escribía bitácoras precisas
acerca del silencio
eras un dios lastimado por las llamas
de ojos improbables
y canciones vagas
y te tuve
tuve un corazón de hombre entre mis sueños
de hombre vivo
de niño famélico
¿fue la orfandad o la inocencia
quien te trajo hasta mi reino?
¡no sé por qué razón acabé así!
sin miedo
demente y eterna
porque la eternidad existe si existes NEO


era la hora cuarta...