lunes, 5 de octubre de 2009


EL SUEÑO

El hombre para dormir muere un poco
- y entre la entrega y su cuerpo
se interpone un ojo que ilumina
la lámpara
la viga
la sombra
por fuera
los ladridos
por dentro
los latidos
es el juego que lo ocupa
yaciendo
inocente
dormido