Ansiosa de ti esta casa desierta se arroja por la ventana no soporta tu rostro dibujado en las persianas tu aroma chorreando en la ducha ni el incienso que sube espontáneo de las velas sabor a ti manzana y canela te araña en las sabanas oxidadas de lluvia mordiendo la noche que para colmo nunca se acaba
DEMENCIA
La locura no tiene dueño no en ningún tiempo de ningún modo sin embargo eres el prototipo perfecto de un ser raro un espécimen embrionario una idea cercana incompleta de lo que mis ojos aman pero aunque parezca extraño yo solo deseo tomarme un café contigo y ver si la luna ha aumentado de talla
¡DULCE NOVIEMBRE!
Viene noviembre con su carga de hojas resecas se le oye a duras penas un susurro de viento endeble queja de madero algo me dice que aún soy forastera sobre este suelo colorido bajo este taciturno cielo gusto de ser hoja para ser llevada sin destino por una misma ráfaga de viento
PENSAMIENTO ESPEJO
Sabe la luna que un pensamiento oscuro habita el espejo y sabe de un corazón encerrado en la imagen que refleja es una extraña manera de conocimiento pero de todas sus profundidades finalmente aprendo que dentro de mi habita un pensamiento espejo
lunes, 3 de noviembre de 2008
LO QUE YO CREI
Creí que eras eterno indestructible indispensable sin fecha de caducidad obligatorio irretornable mentira confortable y necesaria cafeína para las mañanas sueño para el insomnio equinoccio de verano nieve sobre el campanario ciudad con jardines colgantes escalera de mármol mi parte aguas para atrapar lluvia cazar papalotes y nubes con formas extrañas noventa y nueve punto nueve del aire puro que respiraba la vacuna contra todas las enfermedades terrestres aéreas y náuticas pero también eras mortal con torpezas y miedos puntos de fuga que nunca consideré
AUSENCIA
¡Qué frías tienes las manos desmedida ausencia! y esos ojos aguaceros de noviembre árboles desnudos témpanos de tristeza no tengo la llave secreta aunque creo recordar que alguna vez existió la primavera prendida tal vez de vivos colores pero definitivamente vacía de ti desahuciada de tus besos ¡qué frío se ha quedado el recuerdo!