HOMBRE ESTEPARIOA este hombre le sube por el pecho un tibio aromainvade como el amoro la nochecomo si acaso fuera hálito de sueñohay un rocío de piélago profundoque le estallasobre el lienzo de su cuerpome hallo entoncesmirando la desnudez de un horizontecasi tierra sobre arenadonde vagué por un cielo extrañamente broncey fue necesaria una vidala míapara recorrerlo completo
EVOCACION DE TI, ¡OH HOMBRE!No sé que hacer con esta extraña forma de sentirte míoporque volvistecomo un dios vuelve a su orbeaquí están tus dominiossuavidad de nido para tus alas furtivas¿recuerdas el lucero que cayó ante nuestros azorados ojos?¡cómo han crecido desde entonces tus brazos!y tu pielcomo desolada aldeaa la que sólo acuden a rezar viejos poetasyo los tengo aquí reunidostus recuerdosremolino terco de sabores¡arde! corazón ¡arde!aunque se nos tiñan las manos de tristeza